Más estirado que un chicle quedó el productor y juez de «America’s Got Talent» (NBC) Simón Cowell, quien apareció con nuevo look tras inyectarse botox en el rostro.
Pese a que el pasado mes de agosto comentó que se arrepintió del abuso de rellenos faciales, luego de un pésimo resultado, el lamento le duró lo que un suspiro y volvió a pisar el consultorio para quitarse unos años de encima. Pero nuevamente parece que quedó estirado de más.
El magnate de la música, de 63 años de edad, compartió un video en Twitter en el que habla sobre el programa del que hace parte. Lejos de llamar la atención por las novedades del show, lo hizo porque su piel luce sin arrugas, se le nota que bajó de peso, sus dientes son tan blancos que resplandecen, sus labios lucen más allá de raros y tiene una extraña expresión en las cejas.
Las reacciones en la red social de la camarita no se hicieron esperar y fueron tantos los comentarios negativos que Simón Cowell tuvo que tumbar la publicación.
Meses atrás, cuanto tuvo el primer desastre estético, el británico comentó a The Sun que «hubo un tiempo en el que creo que me fui muy lejos… El otro día vi una foto mía de antes y no me reconocí, parecía como sacado de una película de terror». Agregó que su hijo se asustaba cada vez que lo veía.
