La familia real británica digería este lunes (8 de marzo) las declaraciones de una inusual entrevista al príncipe Harry y la duquesa de Sussex, en la que la pareja habla de actitudes racistas y una falta de apoyo que provocó pensamientos suicidas en Meghan.
En una entrevista de dos horas con la estadounidense Oprah Winfrey, la pareja hizo una descripción poco favorecedora de la vida en la casa real, mostrada como una institución fría de la que tuvieron que escapar para salvar sus vidas.
Meghan dijo a Winfrey que en un momento dado, “Simplemente ya no quería vivir” y tenía pensamientos suicidas incontrolables. Dijo haber buscado ayuda a través del departamento de recursos humanos de palacio, pero le dijeron que no podían hacer nada.
La duquesa, que se identifica como birracial, describió cómo, cuando estaba embarazada de su hijo Archie, hubo “preocupaciones y conversaciones sobre qué tan oscura sería su piel al momento de nacer”.
Harry confirmó esa conversación y dijo: “Me quedé un poco conmocionado”. Dijo que no aclararía quién hizo el comentario.
Un nuevo comienzo
La pareja anunció a principios de 2020 que dejarían sus tareas reales y se mudarían a Norteamérica debido a lo que describieron como intrusiones insoportables y actitudes racistas de los medios británicos. La ruptura se hizo oficial este año, y la entrevista estaba ampliamente considerada como su primera oportunidad de explicar su decisión.
Harry, príncipe desde que nació, describió cómo la experiencia de su esposa le ayudó a darse cuenta de cómo él y el resto de la familia estaban atrapados en una institución opresiva.
“Estaba atrapado, pero no sabía que estaba atrapado”, declaró. “Mi padre y mi hermano, están atrapados”. Meghan, dijo, “me salvó”.
“Para la familia, tienen mucho esta mentalidad de ‘Esto es así, así es como debe ser, no puedes cambiarlo, todos hemos pasado por ello’”, dijo Harry. La pareja ha sido muy criticada en Reino Unido antes de que se emitiera la entrevista.
Más unidos que nunca
Los dos se sentaron tomados de las manos ante Winfrey para responder a sus preguntas en un hermoso jardín. La pareja vive en Montecito, California, donde son vecinos de Winfrey.
Las declaraciones provocaron muestras de apoyo en Estados Unidos, donde la entrevista se emitió el domingo 7 de marzo.
La estrella del tenis Serena Williams, amiga personal y que asistió a la boda de Harry y Meghan, escribió en Twitter que las palabras de la duquesa “muestran el dolor y la crueldad que ha experimentado”.
“Las consecuencias para la salud mental de la opresión sistémica y la victimización son devastadoras, aislantes y con demasiada frecuencia, letales”, dijo Williams.
Harry dijo haber vivido con el temor a repetir el destino de su madre, la princesa Diana, que sufrió una cobertura constante de la prensa y murió en un accidente de tráfico en París en 1997 cuando era perseguida por paparazzi.
“Lo que estaba viendo era la historia repitiéndose, pero definitivamente mucho más peligrosa, porque entonces sumas la raza y sumas los medios sociales”, dijo Harry.
Ambos elogiaron el apoyo recibido por la reina Isabel II, abuela de Harry. “La reina siempre ha sido maravillosa conmigo”, afirmó la duquesa.
En uno de los pocos momentos positivos de la entrevista, Harrry y Meghan revelaron que el bebé que esperan para el verano será una niña.
AP