Jennifer Lawrence no fue la misma después de la fama que lo otorgó la saga “Los juegos del hambre”. Según dijo la actriz, la popularidad súbita que ganó a raíz de la popular franquicia la hizo sentir como una “mercancía” en un momento dado.
¿El motivo? Personas involucradas en su imagen tomaban decisiones por ella, según contó en una entrevista que ofreció a la revista Variety.
“Creo que perdí la sensación de control. Entre el lanzamiento de ‘Los juegos del hambre’ y ganar el Óscar (por ‘Silver Lining Playbook’, 2012), me convertí en un producto tan básico que sentí que cada decisión mía era una gran decisión grupal. Cuando reflexiono ahora, no puedo pensar en esos años sino como una enorme pérdida de control”, señaló.
Pero ahora, la también estrella de «Don’t Look Up» siente que recuperó su identidad nuevamente, ya que por fin se siente de nuevo al mando de su vida y su carrera después de mucho tiempo.
Dejando todo eso atrás, ahora Lawrence participa en “Causeway”, un drama que sigue a un soldado que lucha por adaptarse a estar en casa después de abandonar el combate con una lesión cerebral. Además de eso, también produjo la película con su compañía Excellent Cadaver.
“Es un término de la mafia siciliana para un golpe a una gran celebridad. Simplemente tenía sentido. Creo que había una parte de mí que quería ejecutar esa parte de mí”, comentó sobre el nombre de su productora.
Con relación al Óscar que ganó hace casi una década, Jennifer Lawrence admitió que el logro aún no ha digerido ese logro. “Sigo pensando: ‘¿cuándo lo asimilare?’. No creo que lo haga nunca”, concluyó.