Su pícara sonrisa, jocoso movimiento de cejas y variable humor, posicionan a Eddie Murphy como uno de los comediantes más destacables del suelo hollywoodense. A un día de la celebración de su sexagésimo aniversario (3 de abril) repasamos sus más grandes éxitos filmográficos, un deleite tanto para los niños como para los adultos.
Una de las peculiaridades que lo consagran como un actor de gran calibre es la posibilidad de ser multifacético. De hecho, en una sola producción es capaz de asumir a más de tres personajes, como ocurrió en «Norbit».
El chico de Brooklyn
Vale recordar que Eddie Murphy tiene sus orígenes en el distrito de Brooklyn, Nueva York, y puede que sus dotes humorísticos se atribuyan a su padre Charles Edward Murphy, quien además de ser un oficial de policía de tránsito se desempañaba también como actor y comediante aficionado.
A temprana edad una tragedia tocó a su puerta, puesto que su figura paterna fue asesinada en 1969. Paulatinamente, su madre enfermó y tanto él como su hermano mayor, Charlie, se vieron en la necesidad de residir en hogares de acogidos durante un año.
A partir de esa experiencia el actor comenzó a desarrollar su tan destacable sentido del humor. Posteriormente, la dupla fraternal se trasladó a Roosevelt para convivir nuevamente con su madre y su nuevo esposo, Vernon Lynch.
A sus 15 años ratificó su ideal de convertirse en comediante tras escuchar el álbum humorístico de Richard Pryor: «That Nigger’s Crazy».
En la década de los 80 trazó el camino hacia el éxito durante su participación en Saturday Night Live (SNL) y se le atribuyó la gloria de revitalizar, a principios de este período, tan icónico programa de TV de Estados Unidos.
Sus papeles más destacables
En 1984 Murphy se unió al elenco de la exitosa película «Beverly Hills Cop», su primer rol protagónico. Dicha producción recaudó más de 230 millones de dólares en la taquilla de los Estados Unidos, convirtiéndose en la más exitosa de ese año.
Poco a poco se fue posicionando como un alto referente humorístico, siendo así «Un príncipe en Nueva York» uno de los mayores logros de su carrera. En la cinta se abordaban los ideales juveniles del príncipe Akeem quien, hastiado del lujo y el confort que ofrecía su palacio, viaja a Estados Unidos con el fin de emprender una nueva vida.
La secuela de esta producción tuvo su lanzamiento este año desde el streaming de Amazon, y de nuevo las responsabilidades del reino recayeron sobre sus hombros.
Igualmente tuvimos el chance de ver una adaptación moderna de «El príncipe y el mendigo», a través de «Trading Places», donde un par de multimillonarios involucran a Eddie Murphy en un vil experimento social.
Y la lista continúa
Otro de sus protagónicos más irreverentes es el «Profesor chiflado», donde idea una formula que la hace perder peso al instante, pero que a su vez lo va desprendiendo de su gentileza y humildad. Esta es una de las tantas películas donde vemos su carácter multifacético.
Dentro de la comedia también ha asumido el reto de dar vida a personajes más serios, como por ejemplo «Dr. Dolittle». Allí encarnó a un estricto doctor que descubre su habilidad de hablar con los animales.
En «La guardería de Papá» lo vimos romper con los roles de género al emprender su propio negocio de cuidado de niños, hasta comprender que el tiempo con su hijo es el tesoro más preciado del mundo.
Desde luego su característico humor no solo está latente en interpretaciones de carne y hueso, sino también en el mundo del doblaje, ya que le tocó interpretar al divertido «Mushu» en «Mulán» y al fastidioso «Burro» en «Shrek», con el que se robó la atención de los espectadores.