La cantante Björk se mudó de Estados Unidos de vuelta a su natal Islandia en 2020, debido a la creciente violencia por armas de fuego en el país norteamericano.
La también actriz hizo las declaraciones a la revista Pitchfork en una entrevista. La intérprete de 56 años de edad estaba residenciada en Nueva York desde 2002, ciudad donde nació su hija Isadora Bjarkardóttir Barney.
De esta manera, la intérprete de «Venus as a boy» detalló que precisamente su principal preocupación es la joven de ahora 19 años de edad, debido a los tiroteos en escuelas.
«La violencia con armas en Estados Unidos está a a una escala tan alta que no puedo hacerme la vista gorda, además tengo una hija mitad estadounidense en la escuela», dijo la también actriz.
No aguantó
Igualmente, Björk señaló que las cosas en su país son muy distintas cuando se trata de este asunto. «Cuando mi familia y yo estamos aquí absorbo todo de Islandia, cuando alguien es asesinado en el norte todos nos sentimos tristes y heridos. Es una mentalidad islandesa; en cambio, en Estados Unidos como una simple islandesa tanta violencia era demasiado para mí», resaltó.
Por otra parte, la protagonista de «Dancer in the dark» añadió que otro punto de quiebre para ella fue cuando Donald Trump dijo que abandonaría el Acuerdo de París, unión de naciones que toman medidas para combatir el cambio climático. «Es la única vez que algo en las noticias me hizo llorar», detalló.
Desafortunadamente, la propia Björk ha experimentado en carne propia la violencia, pues en 1996 se salvó de un intento de asesinato de parte de un acosador uruguayo nacionalizado estadounidense, Ricardo López, de 21 años de edad, quien le envió una bomba diseñada para rociarla con ácido sulfúrico; para rematar, el hombre se disparó en la cabeza estando en el apartamento de la cantante ubicado en Miami, Florida. Sin embargo, los vecinos alertaron a la artista debido al olor y, acto seguido, contactaron a la policía y estos detonaron el artefacto sin que causara daños, así lo informó El País en ese entonces.