El 2022 comenzó con una lamentable noticia en el gremio de la cultura criolla con la muerte de Andrés García, hijo ilustre de Caicara del Orinoco (Bolívar) quien portó con orgullo el nombre artístico de “El Caicareño”, sobre el escenario llanero.
La noticia corrió “como pólvora” entre los cultores llaneros la mañana del sábado 1ero de enero. Posteriormente supimos que “El Caicareño” sufrió una recaía “post-Covid” que le afectó directamente en su condición de diabético. De esta forma, el nuevo año enlutó al folclor venezolano y de manera especial a los cultores del estado Bolívar; terruño del “Caicareño”, donde era emblema de la canta criolla. Quienes le conocimos de cerca, nos unimos al duelo en un abrazo solidario entre familiares y amigos. Le recordaremos como un cantautor de gran calidad en la composición y versatilidad en la interpretación, tanto del pasaje sabanero, el joropo y también en el recio contrapunteo.
Como muchos en el folclor llanero, Andrés García se inició en el canto prácticamente desde niño; hasta hacer de la música llanera su motivo de vida; su tesoro más preciado. Nos deja un legado musical presente en varias producciones discográficas, entre ellas: “Así canta Caicara”, “Perdiendo también se gana”, “El nuevo dueño de la canta criolla”, “Pluma arte y poesía”, “El poeta del folclore”, “Caramelo”, “Vuelve el poeta con sus letras de oro”, “Canto a una reina”, “El coplero perfecto” y “El hijo de Caicara”.
Recientemente, trabajaba en un proyecto donde “revivía” la leyenda de Florentino y el Diablo, en una versión que llamaría “La Revancha”, con la participación de Armando Martínez, en el papel de El Diablo, Andrés García como Florentino y Cristóbal Jiménez en la presentación y narración de la historia.